Gus Holt había estado huyendo del matrimonio desde que se había librado del suyo, más de diez años atrás. Sin embargo, cuando su antigua prometida, Mary McLean, regresó a Montana, embarazada, sola y más hermosa que nunca, Gus, de repente, anheló cambiar su cama de soltero por una cama de matrimonio...

Mary se había imaginado que ser una madre de alquiler para el hijo de su hermana sería lo más parecido a tener un hijo propio. Al volver a encontrarse con Gus, se sorprendió de su repentino entusiasmo por formar una familia. A pesar de todo, él estaba decidido a volver a conquistarla. Mary sería suya antes de Navidad...