Keir Saunders estaba a punto de cerrar el mayor negocio de su vida... sólo necesitaba un pequeño detalle para terminar de impresionar a sus socios. Necesitaba un accesorio perfecto para un ejecutivo: ¡una esposa! Y ¿quién mejor que Jessica, la directora de su oficina? Era lista, hermosa y... ¡añadiría el toque maestro a su imagen de hombre de negocios!

Sólo había un problema: aquel matrimonio no podía ser una alianza hostil, Jessica tenía que aceptar las condiciones de Keir. ¡Pero Jessica se mantenía inflexible en que las obligaciones de su trabajo no incluían hacer planes de boda con el jefe!