¿Sería aquel hombre tan inaccesible como pretendía hacerle creer?

Linsie estaba decidida a triunfar como periodista. El hecho de que su padre fuera el dueño de la revista para la cual trabajaba la hizo luchar para obtener el éxito sin ayuda. Así que cuando le asignaron su primer misión, una entrevista al misterioso millonario turco Celik Demaril, iba dispuesta a hacer cualquier cosa con tal de lograrla. Pero él se negaba rotundamente a verla. Linsie tenía que pesar en la forma de abordarlo.

Logró, por fin, subir al yate de Celik. ¡Y entonces debió enfrentarse a las consecuencias de su impetuosa conducta!