Ella lo ayudaría a romper la maldición que le negaba la felicidad... y el amor

La bella princesa Isabella de San Rimini necesitaba un experto que descubriese los secretos del palacio real, y todos los caminos conducían al misterioso Nick Black, un ejemplo perfecto de poder masculino. Por culpa de una maldición medieval, Nick Black llevaba errante muchísimo tiempo. De hecho, en otra época se le había conocido como Domenico, un ferviente caballero que no conocería la paz, ni la mortalidad, hasta que pusiera el bienestar de otra persona por encima del suyo propio.

Al aceptar aquella misión, Nick esperaba encontrar algún antiguo truco para romper la maldición, pero nunca habría imaginado que con sólo mirar a los ojos a la encantadora princesa, podría encontrar la mortalidad... y el amor a la manera tradicional.