El lema de Cooper de "todo o nada" destruyó su matrimonio y casi acabó con su salud. Decidido a tener nuevas prioridades, se llevó consigo a su enfurruñada hija y regresó a su pueblo natal.

Sin embargo, él jamás había podido resistirse a un desafío y se encontró con uno al conocer a la atractiva Priss. Aquella joven lo intrigaba y distraía…y evitaba a toda costa estar con él, como si fuera un apestado. Era evidente que tenía miedo de algo pero, ¿de qué? Sin querer, la curiosidad de Cooper lo llevó a descubrir algo que lo enfureció...