Jay Challoner nunca concedía entrevistas a los periodistas; por lo tanto, la única manera de que Charlotte pudiera estar cerca de él y conseguir la información que necesitaba, era a través de métodos un tanto extraños y poco comunes.

Gracias a la fascinación de Jay por las rubias y a la gran habilidad de Charlotte, logró conseguir el puesto de secretaria temporal que Jay ofrecía para poder escribir una novela de aventuras. Al ver la posibilidad de que Jay desapareciera de su vista cuando un colega suyo le pide ayuda desde Ecuador, Charlie le sugiere a Jay, a manera de broma, que la lleve consigo, dándole la sorpresa de su vida cuando él aceptó su propuesta.