¿Cuál era el motivo que había llevado a Candice hasta la isla solitaria? Había estado enamorada de aquel hombre, pero habían transcurrido seis años desde entonces... ¿Para qué intentar remover el pasado, para qué resucitar tanto dolor? Quentin Ross ya no la amaba, su historia de amor era sólo cenizas. Pero Candice no quería darse por vencida, y sus sueños se enfrentaron bruscamente con la realidad.

Candice no podía olvidar aquel amor, el nombre de Quentin latía siempre junto a su corazón. Sabía que un nuevo intento sería inútil, pero la aventura la atraía. Fue hasta esa isla solitaria y lo buscó; pero la respuesta de Quentin la dejó anonadada. Ya nada podía hacer...